El río que pasa por Berna no es otro que el famoso Aar. Esta corriente natural de agua de 291 kilómetros de longitud hace las delicias de los berneses y turistas cuando llega el verano.
Podríamos decir que el Aar es un parque acuático natural en Suiza por el uso que ciudadanos y visitantes le dan. Cuando llega el calor es casi como un deporte nacional situarse en cualquier punto del río y dejarse arrastrar corriente abajo como si fuera un tobogán o una atracción veraniega.

Si vas de visita verás cómo este río que baña a Berna se llena de gente con barcas de plástico, canoas, flotadores y hasta tablas de surf en la misma ciudad. De hecho en el puente Untertor algún atrevido surfista engancha una cuerda a la barandilla para tratar de surfear el río a contracorriente mientras está sujeto. Esta práctica es bastante habitual en países como Alemania o Austria.
Pero no solo en la ciudad de Berna se disfruta del río. ¡Otra gran aventura es dejarte llevar desde algún punto entre Thun y Berna con una barca o canoa! Son hasta 28 kilómetros de aguas turquesas y paisajes de ensueño. Aprovecha la época de deshielo ya que el caudal de río Aar coge fuerza y es mucho más fácil hacerlo.
Meiringen y el desfiladero de Aar
Hay muchos puntos de interés del río Aar a lo largo de todo su cauce. Uno de los más interesantes para los amantes del senderismo es el que tiene lugar a unos kilómetros de Interlaken: el desfiladero de Aar.
El desfiladero de Aar se encuentra en Meiringen y es el lugar perfecto para conectar con la naturaleza.

¿Dónde nace el río Aar?¿Dónde desemboca?
El río Aar es la corriente de agua más larga que discurre íntegramente por territorio suizo (el Ródano es más largo pero desemboca en Francia por el Mediterráneo). Nace en los alpes berneses, su origen está en el Glaciar Aar. Estas aguas caen al lago Grimsel y de ahí siguen por la cuenca del río Aar.
Las cataratas de Sherlock Holmes
Desde su nacimiento, este río que pasa por Berna a lo la largo de unos 30 kilómetros, atraviesa lugares tan icónicos como las cataratas Handeck o las de Reichenbach.
Estas últimas son conocidas por ser el escenario de un relato de la famosa obra de Arthur Conan Doyle, Sherlock Holmes. En el relato 'El problema final' de la obra 'Las memorias de Sherlock Holmes', el detective y su enemigo Moriarty caen por estas cascadas.

Tras cruzar Interlaken y Thun, el río que pasa por Berna termina siendo un afluente del río Rin al norte del país en la frontera con Alemania. La localidad de Waldshut es el punto donde desemboca.
Mapa
En este mapa tiene el nacimiento del río Aar, su desembocadura y los lugares más icónicos a lo largo de su recorrido como la cascada de Reichenbach, el desfiladero de Aar y las ciudades de Interlaken, Thun y Berna.