¡Hay muchas cosas interesantes que ver en Sigüenza! Este pequeño pueblo medieval esconde un patrimonio histórico de los más importantes de la provincia de Guadalajara. Y además es el lugar perfecto tanto para pasar un día como para alojarse varias noches y conocer el resto de deliciosos pueblos cercanos: Atienza, Brihuega, los pueblos negros o Molina de Aragón. ¡Todos son espectaculares!
Sigüenza está localizada al norte de Guadalajara. Tiene estación de tren y se encuentra de camino entre Zaragoza y Madrid. Por ella discurren dos famosos itinerarios turísticos españoles. Uno es la Ruta de Don Quijote, en alusión a "Don Quijote de la Macha, libro de Miguel de Cervantes. El segundo es el Camino del Cid, una ruta histórica y cultural que sigue los pasos del legendario guerrero español del siglo XI.
Los edificios históricos más importantes de Sigüenza pertenecen al periodo posterior al año 1123, cuando la ciudad fue reconquistada por los cristianos. Sin embargo también hay interesantes muestras arquitectónicas árabes escondidas entre sus monumentos y algunos objetos visigodos en sus museos.
La ciudad fue reconquistada por el obispo francés Bernardo de Agén y hoy lo que conquista a los visitantes son sus monumentos, lugares para comer y hoteles donde alojarse. De estos dos últimos temas te hablamos al final de la esta guía. ¡Comenzamos!
Este pueblo fue tan importante en la edad media, que hasta tiene su propia catedral. Del resto de la provincia, solo Guadalajara capital puede decir lo mismo. Y la espectacularidad de la Catedral de Sigüenza es superior.
Las vidrieras son bellísimas y además en una de sus capillas está la espectacular escultura del Doncel. El precio de entrada es de 6 euros e incluye el acceso al Museo Catedralicio y al Museo Diocesano. Podrás acceder a ambos durante las 48 horas posteriores a la compra del ticket.
Consejo
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Las dos piezas artísticas más importantes de la catedral después del Doncel son el Altar de la Virgen de Santa Librada y el Mausoleo de Don Fadrique de Portugal, a los que te recomendamos prestar atención.
Como curiosidad relacionada con la importancia de Sigüenza en el plano religioso hay que decir que en la Hispania visigoda, antes de la invasión árabe, el municipio ya era sede episcopal. Hablamos del año 589 d.C y las Actas del III Concilio de Toledo así lo atestiguan. Sin duda este edificio debe estar en tu lista de lugares que ver en Sigüenza ¡sí o sí!
Precio: 6 euros la entrada general.
Horario: 10.30-14.00 y 16.00-19.00.
Una puerta en uno de los laterales de la nave principal de la Catedral de Sigüenza da acceso a este Museo. La entrada va incluida en el precio y aunque tiene pocas salas, dentro encontrarás obras artísticas muy interesantes.
En este bello palacete neoclásico del siglo XVI aledaño a la catedral se encuentra de hecho una de las dos grandes pinturas que ver en Sigüenza. Se trata de la "La Anunciación" de El Greco.
Pero no es lo único interesante. Los grandes tapices flamencos pintados que encontrarás en una de sus salas relatan historias de la mitología griega. Y también hay una selección de banderas históricas o una colección de faroles de colores que son sacados en procesión cada verano. Se trata de la Procesión de los Faroles de Sigüenza y se realiza el primer domingo después del 15 de agosto.
Si hay una escultura que ver en Sigüenza por encima del resto es la del Doncel de la catedral. Esta joya es uno de los ejemplos más importantes de arte funerario tanto de España como de Europa. Es fácilmente identificable porque se trata de un joven tumbado de lado mientras sostiene graciosamente un libro sobre el que posa la mirada.
Figuras españolas de las letras como Miguel de Unamuno u Ortega y Gasset contribuyeron a difundir su belleza. Hoy es quizás el mayor reclamo del municipio. En la misma capilla encontrarás las tumbas del resto de su familia: los Vázquez de Arce.
Otro museo que ver en Sigüenza es el Museo Diocesano. Es pequeño y se recorre perfectamente en veinte minutos. Aquí se guarda la segunda gran pintura del municipio. Es la "Inmaculada niña" de Zurbarán, de 1630. El Museo del Prado guarda otra versión del mismo pintor, pero realizada en 1656.
El museo, además de pinturas de carácter religioso, tiene una portada románica de una antigua iglesia de Jócar (Guadalajara), una maqueta de la catedral y una gran variedad de objetos religiosos. Sin duda es el complemento perfecto para las visitas anteriores. También hay algunos objetos visigodos.
Precio: 2 euros (gratis si se compra la entrada a la Catedral).
Horario: 11.00-14.00 y 16.00-19.00.
El lugar donde se desarrolla la vida pública del pueblo es su plaza mayor. Se construyó en el siglo XVI en estilo renacentista y está protegida por el ayuntamiento en un extremo y por la catedral en el otro. La plaza Mayor es un lugar perfecto para comer o sentarse a tomar algo en sus terrazas.
Una puerta en la plaza marca el límite de la antigua muralla por el este: es la Puerta de Toril. Si la atraviesas llegaras a un fantástico mirador de Sigüenza, del que te hablamos un poco más abajo. El conjunto de las puertas históricas de Sigüenza es el siguiente (todas están localizadas en el mapa del final del artículo):
Como curiosidad, hay que decir que varias de estas puertas históricas tienen pequeños altares dedicados a la virgen en la cara interior de los arcos.
Si te quieres llevar algún recuerdo de Sigüenza, en las calle Mayor encontrarás tiendas de arte medieval y objetos relacionados con la localidad. Sin embargo si lo que quieres es volver a casa con un delicioso postre te recomendamos acercarte al Monasterio de las Hermanas Clarisas.
Las encontrarás en la iglesia gótica de Santa María de los Huertos. Ellas viven principalmente de los dulces que venden, así que además de endulzarte el paladar estarás colaborando con una buena causa. Entre otros dulces hacen pastel de Santa Clara y su producto estrella son... ¡las trufas!
Una excelente vista panorámica de Sigüenza te está esperando cerca de la Plaza Mayor. Como te dijimos más arriba deberás cruzar la Puerta del Toril. Pasando por encima de un puente y subiendo unas escaleras verás un cartel que indica que te encuentras en el Mirador de la Ronda.
Las vistas panorámicas del municipio con la catedral a la derecha y el castillo a la izquierda son impresionantes. No es el único mirador de Sigüenza ya que otra excelente opción es el Mirador del Cid, localizado a tres kilómetros y medio del pueblo. Si tienes tiempo no dudes en acercarte también a este último.
Consejo
Si vas en tren a Sigüenza prepara la cámara porque justo llegando al pueblo tienes otra panorámica mágica del pueblo con la Catedral y el Castillo en lo alto
La parroquia más importante que ver en Sigüenza es la Iglesia de Santiago, que además es un ejemplo perfecto del buen resultado que se obtiene de invertir en la restauración de edificios históricos. Bajo el suelo guarda los restos arqueológicos de una olvidada estructura defensiva.
Tiene una exposición permanente con fotografías e información de las iglesias de estilo románico del resto de la provincia de Guadalajara. Los elementos de interés originales como los restos de unas pinturas románicas del siglo XVI o las ventanas del siglo XII, también románicas, están perfectamente señalizados.
Hay una segunda iglesia románica en Sigüenza. Se trata de la iglesia San Vicente Mártir. La encontrarás junto a la Casa del Doncel.
Horario: 11.00-14.00 y 16.00-19.00.
Precio: 2 euros entrada individual y 1 euro por persona para grupos.
Este antiguo edificio de fachada gótica fue la vivienda familiar de los Vázquez de Arce, la familia del famoso Doncel. En el interior se esconde un restaurante premiado con un Sol Repsol por su calidad. Asimismo también hay varias exposiciones con distintas temáticas como la pintura o la música.
En este artículo te contamos todos los detalles de la Casa del Doncel, que además de las exposiciones comentadas guarda algunas muestras de arte mudéjar de la época árabe que puedes ver en Sigüenza. Se trata de dos arcos de gran belleza y otros elementos decorativos del siglo XIV.
Además en este museo seguntino hay un restaurante. Sí, tal como estás leyendo. Pasando por un arco gótico del interior de la Casa del Doncel se accede al restaurante Nöla. Tine una condecoración Sol de Repsol.
Esta fortaleza es el último destino de nuestra lista de lugares que ver en Sigüenza. El Castillo de Sigüenza es el punto más elevado de este pueblo medieval. Antigua morada de reyes y obispos en el pasado, hoy es un Parador Nacional donde es posible alojarse y dormir en él.
Si solo quieres visitarlo, además de admirarlo desde el exterior, también podrás acceder libremente a su patio de armas y a las zonas comunes. Si te alojas tendrás acceso a sus salones y estancias. El precio de la habitación sencilla ronda los 100 euros.
De los restaurantes para comer en Sigüenza hemos hecho una pequeña selección que te servirá de ayuda para decidir cuál se ajusta más a tus gustos. ¡Que aproveche!
Si quieres pasar una o varias noches en Sigüenza tienes una interesante oferta de hoteles de rangos de precios muy diferentes entre sí. Te recomendamos algunos:
La Iglesia Santiago de Sigüenza es la parroquia románica más importante de este bello municipio de Guadalajara. Además es el escenario donde se muestran las parroquias románicas más importantes de toda la provincia. Hablamos de iglesias claro, ya que la Catedral de Sigüenza, también es románica en su fachada exterior.
¿Y por qué decimos que es es el escenario? Sencillo. En el interior de este edificio restaurado en el siglo XXI hay una discreta pero fantástica exposición permanente con fotografías del patrimonio histórico románico de Guadalajara. Si quieres conocer esta iglesia, su horario y el precio solo tienes que seguir leyendo.
Localizada en la calle Mayor, a medio camino entre la citada catedral y el Castillo de Sigüenza, verás su portón con los arcos característicos del románico por encima. Hasta la Guerra Civil, cuando sufrió graves daños, era el lugar donde vivían la monjas Clarisas. Desde 2007 ha ido restaurándose.
Construida entre finales del siglo XII y principios del XIII, hasta el año 1522 era el lugar donde se celebraban los concejos de la población seguntina. Por su estado de deterioro la iglesia estuvo cerrada al público hasta 2012.
Si quieres ver otra iglesia románica en Sigüenza, dirígete hacia la calle Travesaña Alta. Antes de llegar a la Casa del Doncel pasarás por delante de la Iglesia de San Vicente Mártir. Su portada es del siglo XII también.
Con la intención de ser el Centro de Interpretación del Románico Provincial, la Iglesia de Santiago expone fotografías de las fantásticas iglesias románicas de Carabias, Atienza, Abánades, Beleña del Sorbe, Pinilla de Jadraque, Sauca o Hinojosa. ¡Las visitaríamos todas! Si quieres coger ideas sobre edificios románicos que visitar cerca de Sigüenza, este es el mejor lugar para decidirte.
En 2017 se descubrieron los que podrían ser los restos más antiguos de Sigüenza hayados hasta la fecha. Se trata de los vestigios de una antigua estructura defensiva previa a la construcción de la iglesia. No hay que olvidar que desde tiempos de los romanos Sigüenza ya fue un lugar estratégico que conquistar.
Aunque hoy la mayoría de paredes de la Iglesia Santiago de Sigüenza están desnudas, los restos de unas pinturas del siglo XVI en uno de sus muros nos hacen imaginar cómo fue por dentro en su esplendor. Los elementos románicos de la construcción están perfectamente detallados en paneles informativos y algunos de ellos son los siguientes:
El horario de acceso es de 11.00 a 14.00 y de 16.00 a 19.00 horas.
El precio de la entrada a la Iglesia Santiago de Sigüenza no está determinado. Se pide la voluntad, que puede ser 1 euro.
La Casa del Doncel es una vivienda histórica de Sigüenza y un icono de este municipio de Guadalajara que perteneció a familias ilustres como la de los Vazquez de Arce, es decir, la familia del famoso Doncel de Sigüenza. Actualmente está abierta al público y guarda varias exposiciones, el Archivo Histórico Municipal y restos de arquitectura árabe. Además esconde un restaurante premiado con un Sol Repsol, que es un galardón similar a la Estrella Michelín.
Se estima que la Casa del Doncel como la conocemos hoy fuese erigida en el siglo XV, aunque tiene restos estructurales que van desde el siglo XIII. Además de pertenecer a la familia Vázquez de Arce y haber sido residencia del propio Doncel (Martín Vázquez de Arce) según cuenta la tradición, también fue el Palacio de los Marqueses de Bedmar.
La fachada exterior de la Casa del Doncel es de estilo gótico e indica la importancia de la vivienda. En el primer cuerpo, por encima de la puerta de entrada, están esculpidos dos escudos. Pertenecen a las familias de Arce y Sosa, respectivamente.
En la fachada del segundo piso verás que solo hay un escudo. Este es el resultado de la suma de los dos primeros escudos y símbolo de la unión de las dos familias. Aunque el Doncel no heredó el apellido Sosa, este era el segundo apellido de su madre, llamada Catalina Vázquez de Sosa. El padre se llamaba Fernando de Arce.
A pesar de que esta Casa del Doncel de época medieval lleve el apelativo dado al menor de los hermanos (Martín Vázquez de Arce), quien realmente tuvo importancia en vida fue el mayor de los dos: Fernando Vázquez de Arce. Llegó a ser obispo de Canarias y gracias a él se instauró la capilla familiar en la Catedral de Sigüenza, incluyendo la escultura del Doncel que hoy venera el mundo del arte.
La Universidad de Alcalá de Henares llevó a cabo la restauración del interior de la Casa del Doncel. En el salón principal están la mayoría elementos arquitectónicos más importantes de la casa.
Destaca un precioso arco de estilo mudéjar de yesería con inscripciones en árabe sobre él. También hay unas ventanas interiores con celosías.
Todo lo mencionado pertenece al siglo XIV. Y este dato es muy importante. Los cristianos hacía ya más de dos siglos que habían reconquistado Sigüenza pero había artesanos procedentes del reino nazarí de Granada que recorrían el norte para vender sus capacidades artísticas, que seguían siendo muy apreciadas.
La Casa del Doncel tiene un pequeño museo con tres exposiciones distintas. Una dedicada a la pintura, otra a la guitarra española y una tercera a la antigua fabricación de alfombras en Sigüenza.
Al entrar en la Casa del Doncel verás unas escaleras que descienden y terminan en un arco gótico del siglo XIII (aparece señalizado). Tras ese arco se encuentra el restaurante Nöla, una muy buena opción para comer en Sigüenza.
Tiene tres tipos de menú cuyo rango de precios va desde los 30 euros hasta los 63 euros. Puedes consultar su carta o reservar una mesa en este enlace.
El horario de la Casa del Doncel es de lunes a domingo de 11.00 a 14.00 horas y de 16.00 a 19.00 horas.
El precio de la entrada a la Casa del Doncel es de 2 euros para una persona individual. Si vais dos o más personas juntas cada entrada costará solo 1 euro.
El Museo Diocesano de Sigüenza es una exposición de arte sacro de este famoso municipio de Guadalajara donde encontrarás algunas piezas de gran interés. Está situado en el interior de un palacete neoclásico y su entrada va incluida en la de la Catedral de Sigüenza.
Este museo es un lugar obligado que ver en Sigüenza si estás de visita. Se ve muy rápido y te ayudará a contextualizar tanto la construcción de la Catedral como la evolución del propio municipio. Además de pinturas, retablos o esculturas que van desde el siglo XII al XX posee una maqueta de la catedral y hasta dos arcos de época árabe.
El Museo Diocesano de Sigüenza tiene dos plantas. En la planta baja, a la que se accede directamente desde la calle, están las pinturas más importantes, incluyendo una obra de Francisco de Zurbarán y otra del taller de Tiziano.
Aquí también encontrarás dos arcos de estilo árabe que sirven para conectar las distintas salas. ¡Y hasta tienen una portada de estilo románico! Esta perteneció a una iglesia de Jócar (Guadalajara). Los cuadros religiosos combinan con escudos tallados en roca o la maqueta de la catedral.
En la segunda planta siguen abundando las imágenes religiosas pintadas sobre lienzo. Y además hay interesantes esculturas de alabastro o marfil. Y también objetos utilizados en las eucaristías por los sacerdotes. Todo muy artístico y ameno.
Por último diremos que hay varias referencias a San Roque, del cuál también hay una ermita en Sigüenza. En los cuadros el santo está habitualmente acompañado por su perro. Y es que así reza el dicho popular: "el perro de San Roque no tiene rabo porque Ramón Ramírez se lo ha cortado". San Roque, además de ser conocido por su perro, era el santo al que se le consideraba protector contra la enfermedad de la Peste.
La Inmaculada Niña de Zurbarán que podrás ver aquí es una pintura del año 1630. Es conocida popularmente como "La Inmaculada de Jadraque", municipio del que llegó la obra a su actual emplazamiento. La pintura de esta imagen fue varias veces plasmada por el pintor extremeño y hoy día pueden verse en el Museo del Prado, el Museo Nacional de Arte de Cataluña o en el Museo de Bellas Artes de Burdeos (Francia).
Esta obra del Entierro de Cristo está atribuida a Tiziano. Y decimos atribuida porque no está completamente confirmado. Sin embargo sí que está demostrado que los pigmentos empleados en el cuadro pertenecieron al taller del pintor, por lo que podría haber sido pintado por él o por sus discípulos.
Este mismo cuadro de Tiziano se encuentra en el Museo del Prado. El del museo madrileño data de 1559 y el del Museo Diocesano de Sigüenza se estima que pudiera ser cercano a 1557. No se sabe con exactitud. Lo que sí se sabe es que antes de pintarse el cuadro del Museo del Prado hubo un primer original que se perdió. ¿Será este?
Esta imagen del entierro de Jesús está colocada junto a otra obra con la misma temática. A pesar de ser dos grandes obras, la diferencia de estilos entre ambas es enorme y se nota el impulso que tuvo la pintura en cuestión de medio siglo. ¿Sabes quién tuvo un papel fundamental en este avance artístico? El gran Miguel Ángel.
Además de las citadas obras, también encontrarás esculturas religiosas de Francisco Salzillo y alguna pintura de Luis Morales El Divino (La Dolorosa). Una escultura fantástica es "El Buen Pastor". Es pequeña, está tallada en marfil y data del siglo XVI. ¡Una absoluta maravilla!
El Museo Diocesano de Sigüenza abre de 10.30 a 14.00 y de 16.00a 19.00 horas.
La entrada al Museo Diocesano de Sigüenza cuesta 2 euros por persona. El acceso es gratuito al comprar la entrada general de la Catedral (6 euros).
El Castillo de Sigüenza es una antigua fortificación del siglo XII reconvertida a Parador Nacional que hoy día funciona como hotel en el que es posible alojarse. También está permitido acceder a su interior de visita para el público general con el fin de ver su patio de armas y las zonas comunes.
Sin duda, la espectacular fortaleza localizada en lo alto de este municipio de Guadalajara es un lugar que no puede faltar en tu lista de sitios que ver en Sigüenza. Si no te alojas en él, al menos podrás disfrutar de su encanto tanto por dentro como por fuera.
Desde finales de 1123 y principios de 1124 cuando el obispo guerrero francés Bernardo de Agén reconquistó Sigüenza e inició la reforma del fortín hasta el siglo XIX el Castillo de Sigüenza fue el lugar de alojamiento de los obispos que ostentaban la plaza episcopal de la Catedral de Sigüenza.
Sin embargo en la actualidad es uno de esos hoteles de alta categoría denominados Parador Nacional y que están situados en edificios históricos o emblemáticos en distintas partes de la geografía española.
Antes que castillo, fue alcazaba, y aún antes, fortaleza romana. Y es que desde su emplazamiento en lo alto del cerro se domina todo el territorio cercano. De hecho la evolución de la fortaleza es la siguiente:
El patio de Armas del Castillo de Sigüenza es el lugar donde se refugiaban los vecinos seguntinos cuando se producía algún ataque. Actualmente es una terraza para el disfrute de los clientes.
Conserva un brocal del pozo que servía para proveer de agua a los habitantes de la fortificación, incluso es caso de asedio. Este pozo tiene una profundidad de 25 metros y antes de llegar al agua hay un túnel excavado del que se piensa que fueron unas antiguas mazmorras. La entrada a estas está tapada.
El interior del Castillo de Sigüenza fue restaurado para conservar el estilo medieval que tuvo en origen. Los salones están cuidados al detalle y sirven de comedor, salón de actos y lugar de esparcimiento. Podrás incluso hacer uso del Salón del Trono.
Por otro lado las habitaciones de este Parador Nacional son amplias y las hay tanto con vistas al exterior como a los patios interiores.
El Castillo de Sigüenza ha vivido cientos de historias y ha sido el escenario de importantes momentos históricos. Por ejemplo fue el Cuartel General del Archiduque Carlos de Austria durante la Guerra de Sucesión Española (1701-1713). Aunque la posesión cambió de manos varias veces a lo largo de la contienda.
Durante la invasión napoleónica (1808-1814) fue utilizado por los franceses como cuartel, con el consecuente deterioro. Las tropas invasoras lo abandonaron temporalmente debido a los ataques que sufrían por uno de los héroes de la independencia española: Martín El Empecinado. A este militar Benito Perez Galdós le dedicó parte de uno de sus famosos Episodios Nacionales.
Sin embargo la historia del Castillo de Sigüenza que más ha llegado hasta nuestros días es la del cautiverio de la joven Blanca de Borbón, Reina consorte de Castilla. Nacida en Francia, tenía solo dieciséis años cuando se casó con Pedro I de Castilla. Utilizada por el rey fue encerrada en este castillo durante cuatro años. La reina consorte murió en 1361 a los veinticinco años de edad en Medina Sidonia (Cádiz), tras vivir permanentemente encerrada durante su matrimonio. Se cree que su marido mandó envenenarla.